Le Butterfly | La deliciosa evolución de una carnicería de los años 90
Le Butterfly, una experiencia de restaurante de carnes moderna centrada en la simplicidad y la calidad de los ingredientes, solía ser una carnicería en los años 90. El padre de Ludovic era el propietario y, al haber crecido en el negocio de la carne, Ludo tiene la excusa perfecta para que uno de sus restaurantes sea su joya de la corona y un homenaje a su padre. Ludovic es uno de los varios socios y realmente se preocupa por los ingredientes que obtienen sus chefs. El chef ejecutivo Rob Leonard realmente hace todo lo posible para encontrar las combinaciones perfectas para la carne.
Enseguida vemos las ventajas de estar en un restaurante cuyo dueño es hijo de un carnicero en el plato de tuétano, que es como la historia servida en bandeja. Un hueso impresionante lleno de tuétano chisporroteante y cubierto con salsa chimichuri. La salsa picante corta la grasa burbujeante a la perfección y crea el entrante ideal para los amantes de la carne.
Si bien no se recomienda a los vegetarianos que vayan a un restaurante estilo steakhouse, las coles de Bruselas dulces asadas son un testimonio de la versatilidad del chef. Asadas suavemente a la perfección en un dulce glaseado de miel y almendras. Son mi combinación favorita para todos los platos principales allí… perfectas para compartir. Me encanta el pequeño crujido de almendras tostadas.
¿Te gusta el cordero? ¡Pues a mí NO! Y adivina qué, me ENCANTA su cordero. Es la primera vez en 6 años que disfruto de un plato de cordero. No es una carne que me guste. El cordero tiene un regusto a caza que me resulta absolutamente repugnante, pero, increíblemente, no noto ese sabor en el cordero de aquí. Mi invitada, Marnie, es una amante del cordero y también le encantó. Es jugoso, tierno y asado a la perfección. Viene con algunas verduras asadas que se olvidan rápidamente porque no son la estrella del plato. Creo que eran zanahoria y espárragos.
¿Lista para la hamburguesa? Estaba segura de que mi viaje a Moishes me había dado una hamburguesa favorita para el resto del verano (las hamburguesas de QDC también son increíbles; Rob y yo hablamos mucho sobre Lefty). Sin embargo… ¡el chef diversificó mis preferencias de hamburguesas en un minuto neoyorquino después de mi primer bocado de la hamburguesa de Le Butterfly! Una hamburguesa jugosa y generosa cubierta con una capa de queso tomme aux fleurs de Alsacia. Este queso sabe a nueces y flores. Un poco de berro rojo esparcido en el alioli de Le Butterfly se comporta bastante bien debajo del pan brioche de sésamo blanco y negro.
Un restaurante no es divertido sin un buen bar. Khal nos preparó martinis de pera con puré de pera auténtico y misteriosas margaritas de pitaya con mezcal Sombra, tequila reposado, Cointreau, jugo de lima, puré de pitaya y una sal ahumada en casa.
Parece que últimamente hay una tendencia hacia los bares largos y cómodos, en todas las renovaciones posteriores a la pandemia y, aunque me molesta tener que darme vuelta constantemente para hablar con mis invitados, ¡me encanta ser parte de la acción! El servicio de bar es puntual y viene con un toque de descaro. La multitud es una divertida mezcla de lugareños y turistas, a diferencia de algunos viejos lugares de moda de MTL que son un poco demasiado turísticos para mi gusto.
Ven por la comida, quédate por la diversión. Le Butterfly será un lugar al que volverás. ¿Te gusta más la comida italiana? Los mismos dueños, restaurante diferente. ¡Haz un pequeño clic para visitar Marcella!
